Publicado el 04/03/2013 por Daniel Grifol
Bastante a menudo a mi compañero Carlos Estévez y a mi nos llegan personas que empiezan a tomar conciencia de la importancia del SEO, o que han tenido alguna mala experiencia con algún SEO en el pasado y que nos cuentas cosas como:
“Me han dicho que en una semana puedo posicionarme el primero para unas keywords super competidas”
o
“Estuve en primera página un tiempo y ahora salgo en la página 16 de Google”
Estos señores muy probablemente han sido víctimas del Black Hat SEO, el lado oscuro del SEO.
Para mejorar el posicionamiento de una página existen una gran cantidad de buenas prácticas que recomienda Google, que son las que solemos predicar los que nos dedicamos al mundo del SEO. Pero también hay técnicas muy rápidas (e ilegales) para hacer que una página se posicione muy bien muy muy deprisa durante un breve periodo de tiempo. Es lo que conocemos como Black Hat SEO.
Al ser prácticas ilegales, cuando Google detecta que estás utilizando Black Hat SEO sobre una página web, la penaliza o incluso la bannea y cuesta mucho esfuerzo y dedicación volver a posicionarla decentemente.
Normalmente estas prácticas Black Hat se basan en un abuso claro y flagrante de algunas buenas prácticas que recomienda Google, con una finalidad enfocada únicamente en mejorar le posicionamiento.
Por ejemplo, que Marketips tenga un par de links en páginas relacionadas con Marketing es algo que Google detecta como bueno. Pero si tuviera 2000 enlaces en una red de blogs de baja calidad que poco tienen que ver con el sector y creados todos la misma semana, seguramente Google nos meta un rejonazo escandaloso y nos mande a los infiernos del SEO.
Estas son algunas prácticas habituales de Black Hat de las que debéis tener cuidado:
Tened mucho cuidado en no incurrir en prácticas Black Hat y sobre todo, no dejéis que ningún listillo os engañe. En el mundo del SEO no hay atajos. La única forma de posicionar tu página es hacer las cosas bien utilizando los tres tipos de SEO con constancia y dedicación.